Punto de inflexión

Hoy he descubierto, no sin asombro, que la gasolina de 95 octanos está por debajo en precio respecto al gasoil de toda la vida.

No sé cuántos días hace que está el tema así, pero era de esperar puesto que todo el mundo compra coches de ciclo diesel.

Además, se está fomentando aún más el uso de este carburante por las última norma que se han sacado de la manga para el impuesto de matriculación que penaliza el CO₂ que se produce en la combustión.

Es cierto que en este sentido, los coches diesel son más limpios, aunque es porque consumen menos. En realidad, por litro de combustible, es el gasoil el que produce más CO₂.

Pero lo que más me preocupa es que se está obviando que el diesel produce mucho humo, que no son más que partículas en suspensión que afectan mucho a las personas aumentando los efectos de las alergias o produciendo cancer por tener los pulmones llenos de carbón.

Allá ellos.

Esperemos, aunque ya está llegando, una nueva generación de motores gasolina más eficientes mientras no se encuentra una solución alternativa.
Entre tanto, los que apostamos por la gasolina, amortizamos cada vez más, ese dinero que nos ahorramos en la compra.