Se acaba un año y una década
Para mi, 2010 ha sido un año realmente bueno. Inolvidable.
Ha habido cambios importantes en mi vida que han hecho que consiga unas vacaciones extraordinarias por lugares muy lejanos del planeta y, además, he visitado ciudades extraordinarias del viejo continente.
A pesar del chaparrón financiero, me he merecido un discreto aumento, aunque ya estoy haciendo más funciones de las que debería por mi categoría.
Este blog parecía abandonado, pero he vuelto para darle un aire fresco y seguir explicando mis cosas.
He crecido enormemente como persona y como profesional y, gracias a personas que me quieren, he disfrutado con cosas que al principio, no quería ni hacer.
Durante esta década he tenido dos grandes pérdidas que no me habría gustado tener, pero que nunca olvidaré.
También he hecho lo se supone que todos tenemos que hacer alguna vez. Comprar una casa y un coche (ya está pagado).
Así que para la nueva década, sólo me queda pensar en todas las cosas buenas que están por llegar y todo lo que me queda por crecer como persona.
No creo que debiéramos felicitarnos por cada año nuevo, sino por cada nuevo día de aventuras en esta vida.
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